viernes, 9 de enero de 2009

Creer o no creer

Soy usuaria del TMB (Transporte Metropolitano de Barcelona), por lo que la controversia suscitada por los anuncios que la Asociación de Ateos ha puesto en marcha en las marquesinas de los buses (Dios no existe, disfruta de la vida) me afecta directamente.

Y no en sentido positivo o negativo. En un país aconfesional, qué menos que cada uno pueda expresarse libremente. Lo que me llama la atención es que los ateos sepan tan poco de los creyentes y viceversa.

Por otro lado, y con mero carácter anecdótico, os cuento la última colección que he visto en el Kiosko este mes ( que como septiembre, está lleno de buenos propósitos y coleccionables). Rosarios del Mundo. Había oído hablar de la casa de muñecas andaluza, la construcción del tiranosaurius rex, pero esto roza lo surrealista. Pero lo dicho, alguien habrá que le guste, y al igual que es fácil ser tolerante con la Asociación de Ateos, la señora beata del entresuelo también tiene sus gustos, qué narices.

4 comentarios:

RAMPY dijo...

Hola soy el primero y aprovecho, ya que no había tenido la ocasion de hacerlo antes de desearte que tengas un año muy feliz.
Un beso enorme y feliz fin de semana.
PS. lo de las colecciones no me extraña ya nada.

Unknown dijo...

Hola...

Tremenda reflexión la tuya, amiga. Estamos de acuerdo en que cada cual que haga lo que le dé la real gana, dentro de un orden, claro.

Ser ateo, agnóstico, etc, no debe de estar reñido con el respeto a otras personas y sus creencias, cosa, que también es extrapolable a muchas otras vertientes: la política, las artes, las costumbres, etc, etc.

Un abrazo.

Anónimo dijo...

Que desde tiempos de Aquino (el santo)estemos hablando de esto...tiene su mérito!!!

Ana dijo...

Hola!

Hubo una guerra entre los anuncios de los ateos en los buses que respondían a otros anuncios fabricados por católicos con una frase de Gandhi que decía que cuando no te queda nada sólo te queda Dios o algo así (ya ni me acuerdo)..y lo más divertido fue la tienda de condones que sacó la contrarrespuesta, pero fue retirado, supongo que porque podía molestar a gente de los dos bandos.
¡Estamos loquísimos!
No tendría que ofenderse nadie por la forma de pensar ajena.
Besitos