Este post va dedicado a todas aquellas personas que, por un motivo u otro, hacen mella en nuestra vida y, por voluntad propia o fuerza mayor, desaparecen de ésta.
Es para gente que hemos considerado especial, bien un minuto, bien una eternidad. Personas con quienes hemos vivido vidas paralelas a la actual, que permanecen en nuestro pensamiento aunque en la vida real su papel esté limitado por opción personal o por circunstancias ajenas.
A todas, o a cada una de ellas, va dedicado un pensamiento, un beso, un desplante , una canción.
O un poema:
Afán para no separarme de ti,por tu belleza, lucha por no quedar en dónde quieres tú,aquí en los alfabetos, en las auroras, en los labios.Ansia de irse dejando atrás anécdotas, vestidos, caricias,de llegar atravesando todo lo que en ti cambia,a lo desnudo y a lo perdurable.Y mientras siguen dando vueltas y vueltas, entregándose,engañándose, tus rostros, tus caprichos y tus besos,tus delicias volubles, tus contactos rápidos con el mundo,haber llegado yo al centro puro, inmóvil, de ti misma,y verte cómo cambias, y lo llamas vivir,en todo, en todo si, menos en mí, dónde te sobrevives.
Pedro Salinas perdura... aunque en mi mente intente borrarlas.
Oniromancia
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- ¿Por qué te empeñas en querer ser ciego?
- Para desconocer el color del miedo.
Hace 9 años
3 comentarios:
Todas las personas deberían tener su minuto de gloria en la mente de las otras personas.
Precioso post.
Besos
De momento prefiero no incluirme en tu dedicatoria.... :-)
Por cierto, por si no nos comentamos antes de navidad :-)
Felices fiestas. :-)
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